Niños señalando destino en un mapa del mundo

Programas de inmersión lingüística en inglés durante la etapa de educación infantil

En un mercado laboral cada vez más competitivo, y en un entorno cada vez más internacional y multicultural, la competencia en otros idiomas se convierte en pilar imprescindible en la formación de nuestros pequeños. Y es precisamente en los primeros años de vida cuando la adquisición de otros idiomas se puede consolidar de manera más fácil y duradera.

Es por ello que multitud de guarderías y centros infantiles comienzan a ofrecer inmersión en la lengua inglesa, sin duda el idioma de mayor transcendencia internacional en la formación de los alumnos. Pero ¿en qué consisten estos programas de inmersión? ¿Se llevan a cabo de manera adecuada? ¿Consiguen el objetivo de formar a niños totalmente bilingües y capaces de manejar la lengua inglesa de manera competente en todos los ámbitos de la vida cotidiana?

Comencemos por definir qué es exactamente un programa educativo de inmersión lingüística.

Un programa educativo de inmersión lingüística consiste en un modelo en el cual los estudiantes aprenden una o distintas materias utilizando el idioma a aprender como lenguaje vehicular. Esto significa, no se enseña inglés como materia, sino que se trabaja en las distintas áreas de aprendizaje utilizando el inglés como idioma de trabajo.

Algunos de los factores de enorme transcendencia para que estos programas de inmersión lingüística consigan el objetivo marcado son:

  • Tiempo de exposición a la nueva lengua. Es por ello que centros de inmersión total tienen unas probabilidades de éxito infinitamente mayores, al aprovechar al máximo el tiempo en que el alumno está expuesto al nuevo idioma.
  • Consistencia 1 adulto = 1 idioma. No conseguiremos nuestro objetivo si una misma persona alterna un idioma u otro dependiendo de la actividad o el momento del día; el alumno sabe que puede comunicarse en la lengua que le sea de más facilidad, y no hará el consecuente esfuerzo por utilizar el nuevo idioma.
  • Solidez del modelo. Para que el alumno pueda adquirir una lengua de manera sólida debe de tener como referencia a un adulto que utiliza la lengua de una forma absolutamente competente, lo que llamaríamos un nativo/a o una persona completamente bilingüe.

Es fundamentalmente debido a un mal uso de uno o varios de estos factores que muchos centros de inmersión lingüística no consigan el objetivo marcado. Cierto es que muchos de estos alumnos aprenden vocabulario, cantan canciones en inglés, e incluso son capaces de formar pequeñas frases o responder a preguntas o instrucciones simples. Pero esto no siempre conlleva a un uso competente de la lengua en los distintos ámbitos de la vida cotidiana, por lo que no podríamos afirmar que hayan recibido una educación bilingüe.

Pasemos ahora a analizar por qué es tan importante que este aprendizaje del idioma se inicie a edades muy tempranas, preferiblemente desde el nacimiento.

Cualquier idea de que aprender inglés es difícil aplica solo a adultos, quienes probablemente aprendieron el idioma de manera académica a edades más tardías y a través de libros de gramática. Sin embargo los niños aprenden el lenguaje de manera natural e inconsciente, contrariamente a lo que ocurre con adolescentes y adultos, ya que poseen la habilidad de imitar pronunciación y elaborar las reglas del lenguaje por sí mismos. Es por ello que, para que este aprendizaje sea fácil y duradero, necesitamos que comience lo antes posible en la infancia, preferiblemente antes de los 3 años de edad.

A continuación enumeraremos algunos de los beneficios de un temprano aprendizaje del idioma a través de la inmersión lingüística:

  • Los niños están aún utilizando su sentido innato y estrategias de aprendizaje en su lengua materna, y pronto comienzan a utilizar estas mismas estrategias para aprender el nuevo idioma.
  • Los niños tienen tiempo de aprender a través del juego. Aprenden el idioma mientras participan en actividades compartidas con el adulto. Primero toman sentido de la actividad en si para luego obtener el significado del lenguaje utilizado por el adulto en dicha actividad.
  • Durante esta primera etapa los niños aun tienen tiempo para invertir en el aprendizaje del idioma, ya que sus mentes aún no están compartimentadas para almacenar otras asignaturas. Aun no tienen tareas para casa, y no existe el estrés añadido de tener que alcanzar determinados niveles de conocimiento.
  • Aquellos niños que tienen la oportunidad de aprender un segundo idioma en la infancia desarrollan una serie de estrategias y habilidades innatas en la adquisición del lenguaje, de manera que el aprendizaje de un tercer, cuarto e incluso más idiomas resulta más fácil.
  • Los niños que aprenden un idioma a una edad temprana, y de manera inconsciente, tienen muchas más posibilidades de presentar una mejor pronunciación y de sentir más en la totalidad el idioma y la cultura.

Tras mis más de 15 años de experiencia en la educación infantil bilingüe en Londres, y posteriormente en Barcelona, creo poder afirmar que, el mejor regalo que podemos hacer a nuestros pequeños es el dotarles con el don del bilingüismo, siendo capaces de aprender la lengua inglesa a una edad temprana, cuando esta adquisición puede producirse de una forma mucho más fácil y duradera. Es increíble poder ver como niños de 1, 2 y 3 años son capaces de desarrollar distintos idiomas de manera simultánea y de una forma maravillosa. Y solo con un programa educativo de inmersión lingüística total podemos acercarnos a este nuestro objetivo.

Para acabar este articulo me gustaría dejarles con un video de Patricia Katherine Kuhl, profesora de Ciencias de Audicion y Lenguaje y co-directora del Insituto de Ciencas del Aprendizaje y del Cerebro en la Universidad de Washington, e internacionalmente reconocida por sus estudios en la adquisición temprana del lenguaje.